Pequeño ,
pero gigante
de simple
corazón,
niño
siempre…
para amarte
no hace falta una razón.
Si caminas
por mi vida,
de colores
vas pintando,
cada día,
iluminando
cada mañana,
renovando.
Tu sana y
pura sonrisa
es espejo de
tu alma,
es tan
nítida,
tan clara
que a la
noche hace blanca.
Se ríen tus
ojos
mientras
miras el mundo,
yo sé que
no encuentras,
en él nada
oscuro.
Tu inocencia
, te envuelve,
grande no te
deja ser…
te quisiera
chiquito…
como cuando
al nacer…
Eres ese
hombrecito
eres todo mi
amor,
mi pequeño
hijito,
Rey; en el
reino de mi corazón.